En Baztan, los pequeños senderos, las montañas y los ríos rodean los palacios y los grandes caseríos. Un valle tan autentico como bello, en unas tierras que han sido el escenario de importantes sucesos históricos; fue el último bastión del Reino de Navarra y los peregrinos, las brujas y los contrabandistas también dejaron su huella. Este es un valle donde las leyendas y los personajes mitológicos se mezclan muchas veces con otros reales, un lugar misterioso y especial. Baztan, y concretamente Erratzu, es el lugar donde se encuentra el nacedero del río Bidasoa.
El valle de Baztan constituye el municipio más extenso de Navarra. Con una superficie de 364 kilómetros cuadrados, a él pertenecen quince localidades: Oronoz-Mugaire, Arraioz, Irurita, Almandoz, Berroeta, Aniz, Ziga, Lekaroz, Gartzain, Elbetea, Arizkun, Azpilkueta, Erratzu, Amaiur y Elizondo, el pueblo más grande del valle. No existen deslindes, hitos ni mojones .Todos sus habitantes disfrutan del aprovechamiento común de las tierras, pastos, aguas y cortes de leña.
Hoy en día, Baztan ofrece al visitante una extensa oferta turística y servicios; casas rurales, visitas guiadas, productos gastronómicos de gran calidad, senderos bien señalizados, restaurantes, empresas de turismo activo,… también cuenta con una rica oferta cultural, ferias y fiestas donde se podrá conocer el Baztan más auténtico.